Diego Bialolenkier tiene 36 años y podría recibir cinco de prisión, a cuatro meses de la muerte de la periodista y legisladora.
El médico endoscopista Diego Bialolenkier fue indagado esta mañana por el delito de homicidio culposo en el juzgado Criminal y Correccional número 57, donde se investiga la muerte de Débora Pérez Volpin, ocurrida el 6 de febrero en el Sanatorio de la Trinidad.
En la indagatoria –realizada a pedido de los familiares de Pérez Volpin– también participaron el juez Carlos Bruniard y la fiscal Nancy Oliveri.
En un principio, estaba planificada para el viernes pasado, pero el abogado defensor pidió una postergación y finalmente se concretó este miércoles. Mañana será el turno de la anestesista, Nélida Inés Puente.
Bialolenkier llegó a las 8.30 acompañado por su abogado, Roberto Churba y se retiró al mediodía sin hacer declaraciones a la prensa.
Según el informe final de la autopsia Débora Pérez Volpín falleció por el daño que le produjo el aparato del endoscopio en el esófago.
El ingreso del aire le provocó un colapso en el resto de los órganos del que no se la pudo recuperar. Los abogados de la familia sospechan de que hubo negligencia tanto en la realización del análisis como en los ejercicios posteriores de reanimación.
Por los delitos que fue imputado el endoscopista podría recibir penas de hasta 5 años de prisión y una inhabilitación de 10 años para ejercer la profesión.
